Convertirse en empresario… significa asumir muchos riesgos y roles. Además de vender, producir, administrar, comunicar, necesitará saber cómo manejar su negocio. La gestión no se trata sólo de «contabilidad» en sí misma, sino de organizar los recursos humanos, materiales y financieros.
A continuación, de la mano de JEYPA, asesoría de empresas, te adjuntamos una serie de sencillos consejos realmente útiles para crear y desarrollar tu sueño empresarial evitando caer en los errores más comunes.
Se un actor en la gestión de tu negocio
Todo lo que se puede medir se mejora. Es por eso que necesitas estar en el asiento del conductor cuando empieces tu negocio. Esto te permitirá entender cómo funciona tu negocio, evitar sorpresas desagradables (fechas de vencimiento de impuestos, pagos a proveedores, etc.) y conocer las diferentes estrategias para desarrollar tu negocio.
Un buen dominio de la gestión de tu empresa te ayudará a tomar las mejores decisiones y a alcanzar los objetivos definidos en tu plan de negocios. No se recomienda la subcontratación total.
Mantén tu contabilidad al día
No lo veas como una limitación, sino como una ayuda para dirigir tu negocio. Aunque tu contable estará siempre pendiente, es importante que no pierdas interés en el tema de los números.
Esto te permitirá dialogar libremente con él sobre el análisis del rendimiento de la actividad, la preparación de tus previsiones presupuestarias, y el estado de flujo de caja…
Establecer un calendario de plazos
Dependiendo del sistema fiscal que elijsa, tendrá un mínimo de trámites que realizar:
- El registro contable de sus recibos y compras,
- Declaraciones de impuestos (IVA, Sociedades, IRPF, Impuestos varios…),
- Nóminas, declaraciones de la seguridad social… si eres un empleador,
al menos las cuentas anuales, una Junta General y un informe de gestión… si es una empresa, y así sucesivamente.
Estate atento a los retrasos en los pagos
¡No anticipar la coordinación en las fechas de pago entre tus clientes y proveedores puede ser fatal para la empresa! Este es un factor extremadamente importante para la buena gestión de tu flujo de efectivo.
Porque una empresa en crecimiento, que no controla su flujo de efectivo, puede poner la llave de cierre en la puerta rápidamente.
Para hacer frente a los posibles problemas financieros, puedes crear previsiones de flujo de caja, negociar una línea de crédito con tu banco o acumular una reserva de capital de explotación más adecuado para tu empresa.
Asegúrate de llevar un registro de tus presupuestos y facturas
No metas la cabeza en la arena, porque el flujo de dinero es la sangre vital de la supervivencia de una empresa. Al contrario, ¡ser reactivo y proactivo! Cuando las necesidades del cliente son claras y precisas, el presupuesto debe ser enviado en 48 horas. Crea una relación con tu persona de contacto (responsable de la toma de decisiones), es decir, si tu cliente ha recibido la cotización y que estás a su disposición si tiene alguna pregunta. Luego, se enviará un recordatorio al final del período de validez de la cita para reforzar el proceso de venta.
Hazte conocer a tus clientes y proveedores, para que la relación sea más fluida, especialmente durante los recordatorios y la recepción de las facturas.
En el caso de estos últimos, establece un calendario de seguimiento de los pagos de los clientes para garantizar el pago de tus facturas.
Controla tus costes de producción
Es importante conocer tus costes en detalle y asegurarte de que su margen será suficiente para cubrir tus gastos externos. ¡Esto te permitirá tener una negociación más fluida con tus proveedores, y sobre todo no vender con pérdidas!
Permítenos ayudarte a crear su tablero de administración
Hay varias soluciones para ayudarte en el desarrollo de tu tablero:
- Un equipo contable y de administración en la aplicación de tu control de gestión.
- Una buena gestoría y asesoría de empresas cuya misión es ayudar al director de la empresa en asuntos de gestión.
- Contar con ayudas, subvenciones, organizaciones de apoyo y seguimiento de las empresas jóvenes.